DIECI vuelve a Sochi

Se podría decir que DIECI se encuentra en Sochi como en su casa, el circuito a orillas del Mar Negro donde el domingo 30 de abril se celebró el Gran Premio de Rusia y en el que por desgracia (perdón pero somos ferraristas…) el Mercedes de Bottas superó a los Ferraris de Vettel y Raikkonen.

El circuito de Sochi es uno de los más largos del campeonato (casi seis kilómetros), junto con los de Spa-Francorchamps, Baku y Silverstone, y su trazado pasa por las futuristas instalaciones construidas para las Olimpiadas de 2014 como, por ejemplo, el Bolshoy Ice Dome o el Fisht Olimpic Stadium, edificios que caracterizan el paisaje del circuito.

Este año, en el circuito destacarán los colores amarillo y negro de los vehículos DIECI que se ocupan del servicio de recuperación y urgencias. Sochi cuenta con 12 máquinas (10 Zeus 37.7 y 2 Dedalus 30.7), las cuales lucen un nuevo look bicolor (diseñado para la ocasión) que no tiene nada que envidiar al estilo multicolor de los vehículos de Fórmula 1.

Los vehículos están gestionados por TES GROUP, uno de los distribuidores oficiales de DIECI en la Federación Rusa, quien también pone a disposición el equipo de 16 personas (14 operadores y 2 técnicos de servicio) que colabora con los “Track Marshals” situados en puntos estratégicos a lo largo del recorrido y listos para intervenir. El trazado del Circuito de Sochi tiene 12 curvas a la izquierda y tan solo 6 a la derecha (algunas con un radio de 90°), y sus altos bordillos someten a un gran esfuerzo los neumáticos, los frenos, las superficies aerodinámicas y, por supuesto, ¡la espalda de los pilotos! Si a las características del circuito le sumamos las de la clasificación (con la lucha entre Ferrari y Mercedes), ¡las probabilidades de intervención eran realmente altas! Y así fue. Ya durante las pruebas los equipos de recuperación estuvieron ocupados en pequeñas intervenciones de rutina, pero fue durante la carrera donde se puso a prueba la eficiencia, la rapidez y la velocidad de los operadores y las máquinas. Tras la salida fulminante de Bottas, los dos Ferraris -seguidos por el resto del grupo- protagonizaron una auténtica persecución.

Durante la disputa, en la segunda curva, el Haas del francés Grosjean tocó el Renault de Palmer y ambos terminaron contra las barreras. Ningún daño (excepto en el orgullo) para los dos pilotos, pero debido al accidente tuvo que intervenir la Safety Car y fue necesario interrumpir la carrera. En pocos minutos, el Zeus 37.7 situado en la vía de evacuación a la salida de la curva enganchó y retiró los dos vehículos, mientras los Marshals quitaban los peligrosos restos que había sobre el trazado. Cuando ves el vídeo no puedes dejar de admirar la sangre fría y la profesionalidad de los operadores que, en tiempos mínimos y no obstante la tensión del momento, permitieron retomar la carrera. Si bien la recuperación del Renault no fue particularmente problemática, porque se encontraba justo delante de la vía de evacuación, si lo fue la del Haas porque estaba pegado a las barreras del rectilíneo y peligrosamente cerca de los monoplazas que zigzagueaban por la pista para mantener calientes los neumáticos. Pero gracias al Zeus y a la profesionalidad del equipo, el problema se resolvió en pocos segundos.

Sochi no es solo Fórmula 1: el equipo de TES GROUP permanecerá en Sochi durante la temporada completa de 2017 para participar en otras actividades que se celebran en el circuito, como, las competiciones de Fórmula 3, Fórmula 4, Endurance y Power Cars entre otras.

Una prueba más de la pasión por los motores que une a DIECI con el multicolor mundo de las carreras.